Gascón
Categoría/Category: Zona de Olivar
Tipo/Type: A pie
Grado de dificultad/Route difficulty: Bajo
- Distance Instructions
-
Distancia
Distance 4.82 km -
Tiempo
Time 1 h 12 min -
Velocidad
Speed 4.0 km/h -
Min Altitud
Min altitude 0 m -
Pico
Peak 0 m -
Escalada
Climb 0 m -
Descenso
Descent 0 m
1. Inicio
Nos disponemos a recorrer la finca de olivar “Gascón”, situada en el término municipal de Marchena, y muy cerca de la localidad de Lantejuela. Tiene una superficie de alrededor de 57 hectáreas, aunque en ella se entremezclan cultivos de olivar, granados y espárragos, en todos los casos manejados con gestión ecológica y biodinámica. El AOVE que producido en esta finca se vende bajo la marca “Pilares: aceites de autor”. En la entrada encontramos un panel informativo sobre el proyecto olivares vivos. En la parte posterior del panel se han instalado bloques de madera con agujeros para ayudar en la reproducción de insectos polinizadores.
2. Lindero verde
Desde este punto y a lo largo de gran parte del camino, es posible observar la revegetación que se ha hecho en la linde, con distintas especies vegetales. Estas formaciones, que con el tiempo constituirán un seto, permiten el establecimiento a su alrededor de una interesante comunidad faunística: insectos que realizarán la puesta de sus huevos en las especies plantadas o que se alimentarán del polen y néctar de sus flores, aves que se alimentarán de esos insectos o de las bayas de muchos de estos matorrales, reptiles que se refugiarán alrededor de los tallos, etc. Además, estas formaciones vegetales lineales facilitan el desplazamiento de muchas especies de fauna. Esta plantación en la linde de la parcela la podremos observar a lo largo de gran parte de la ruta que estamos realizando.
3. Revegetación del arroyo
Se ha realizado una plantación en el arroyo temporal que encontramos a nuestra izquierda. Estas plantaciones se suelen realizar con un doble objetivo. Por lado, para enriquecer la vegetación natural que se desarrolla en estas formaciones, con especies de interés para favorecer a diferentes grupos faunísticos, como insectos polinizadores o aves insectívoras. Y por otro, como método para mejorar la defensa contra la erosión, que es uno de los principales problemas al que actualmente se enfrentan la mayor parte de los olivares. No es el caso de Gascón, gracias a su orografía llana y a la excelente gestión de la cubierta herbácea que se realiza en la finca. En este lugar, además se ha instalado un pequeño bebedero para fauna, que resultad de gran utilidad para la fauna en los meses estivales.
4. Murete
El pequeño muro de piedra seca construido aquí crea un hábitat similar al que proporcionan las formaciones rocosas naturales. Los recovecos entre las piedras son un medio que aprovechan los insectos, pero también pequeños mamíferos y reptiles, como lugar de descanso, caza y refugio. Así, si tenemos suerte y con un poco de paciencia, probablemente podremos ver alguna lagartija que se calienta al sol. Algunas aves emplean también estos muretes para posarse y observar desde ahí la presencia de posibles presas, situarse fuera del alcance de algunos depredadores o resultar más visibles en sus cantos nupciales.
5. Bebedero
El agua es un recurso imprescindible para mantener la vida. Por ello, para hacer frente a los periodos de sequía típicos del clima mediterráneo, se ha instalado en este punto un bebedero que ayuda a la fauna a pasar mejor el periodo estival. Un lugar idóneo, ya que aquí existe una transición entre diferentes cultivos que aporta diversidad al paisaje y favorece la presencia de una mayor diversidad de especies.
6. Poste-posadero
Para compensar la pérdida de árboles de cierto tamaño asociada a las zonas cultivadas, se ha instalado un poste-posadero. Desde éste, las aves pueden posarse para descansar y otear la zona en busca de comida. Además, tiene en su parte superior una caja nido, de dimensiones adecuadas para pequeñas rapaces y córvidos.
7. Charca
La charca no solo es un punto de agua para que puedan beber los animales de la zona, sino que es un hábitat en el que los anfibios se pueden alimentar, reproducir e hibernar. Se ha construido cerca de un arroyo, cuyo cauce baja seco la mayor parte del año, por lo que la charca podrá ser usada por la comunidad faunística asociada a este arroyo, de manera complementaria.
8. Pequeño parche de vegetación natural
Entre las encinas que aquí aparecen se ha dispuesto un nidal para insectos (construido con cañas huecas y maderas perforadas con multitud de agujeros que los insectos pueden usar para realizar sus puestas). De igual modo, hay dos cajas nido en los árboles cercanos. Estas encinas son un interesante foco de biodiversidad, permitiendo la aparición de especies de aves como el carbonero común, o de aves de mayor tamaño como el búho chico. Aunque el olivar, por sí mismo, es capaz de albergar un importante número de especies, la heterogeneidad de hábitats a su alrededor incrementa su número, tal y como Olivares Vivos está confirmando.
9. Cajas nido
Continuando por este padrón, al amparo de unos eucaliptos, se han instalado cuatro cajas nido. ¿Las ves todas? Las cajas nidos ayudan a las aves “trogloditas” a encontrar un lugar adecuado de nidificación. Se denominan así a las aves que muestran preferencia por realizar sus puestas en oquedades.
10. Refugio para murciélagos
Aprovechando las ruinas de un cortijo, se ha instalado otra caja, pero de diferente aspecto. Es una caja abrigo destinada a los murciélagos, pequeños mamíferos voladores que suelen buscar sitios bastante similares a los que ofrece este refugio para dormir durante el día. Sus finas aberturas permiten que accedan al interior al tiempo que impiden el acceso de posibles depredadores. De esta forma favorecemos que se instalen en el olivar, con todas las ventajas que ello tiene para el cultivo, ya que son voraces consumidores de insectos y ayudan a mantener el equilibrio entre especies, evitando la aparición de plagas.
11. Linde revegetada y murete
Mientras nos adentramos de nuevo en el olivar, pasamos al lado de otro elemento lineal revegetado: un camino que hace linde con la parcela vecina. Como ya sabemos, este corredor favorecerá que la fauna puede desplazarse a cubierto. De igual modo, se ha construido otro murete como el que vimos con anterioridad. A partir de este punto, dejaremos el camino y la linde y nos adentraremos en el interior de la finca, para comprobar cómo la presencia de cubierta herbácea permite caminar de forma cómoda entre los olivos. Además, si prestamos un poco de atención, podremos encontrar numerosos insectos asociados a estas plantas herbáceas, variando su composición según la época del año en la que nos encontremos: saltamontes, escarabajos, hormigas, mariposas, abejas y abejorros, polillas, etc.
12. Final
De este modo, finalizamos la ruta. Una ruta que variará atendiendo a la estación del año ya que, dependiendo de cuando la hagamos, podremos haber visto la cubierta herbácea o las plantaciones de espárragos en sus distintos estadios. Algo similar a lo que ocurre con los parches de vegetación que hemos visitado y los cauces de los arroyos. Auténticos focos de biodiversidad de los que toda la parcela y el olivar se benefician.